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Prólogo

SUELOS, VEGETACION Y FAUNA. EL ENTORNO NATURAL BIÓTICO.

Por Guillermo Meaza

En las páginas que siguen se aborda el estudio del entorno natural biótico de Euskal Herria tomando como base los grandes tipos de vegetación con sus suelos y fauna asociados. Por otra parte, cada una de las unidades resultantes es analizada desde una triple perspectiva: como elemento del paisaje geográfico, como componente del sistema territorial y en sus aspectos valorativos y de uso y gestión.

El capítulo 1 esboza el marco ambiental y las bases florísticas, faunísticas y edáficas que condicionan y configuran el entramado biótico. El capítulo 2 presenta un esquema de la vegetación natural potencial de las diversas comarcas ambientales de Euskal Herria. Los grandes tipos de bosque, con sus etapas de matorral y pastizal y su fauna y suelos asociados, intitulan los capítulos 3 al 7, en tanto que el 8 está dedicado a los ambientes especiales. Por fin, el capítulo 9 atañe a las plantaciones forestales, estrechamente relacionadas con el tipo de manejo y gestión actual del territorio vasco.

Tras la ingente aportación de precursores de la talla de los Allorge, Gaussen, Gredilla, Guinea, etc. y como resultado de la creciente labor de investigación de Departamentos universitarios y asociaciones científicas de dentro y fuera de Euskal Herria, en los últimos 25 años se ha producido un importante incremento de monografías sobre la vegetación, la flora, la fauna y los suelos del territorio vasco. A partir de esta investigación de base ha sido posible elaborar trabajos de síntesis bien en lo que respecta al ámbito espacial de estudio, bien a la integración de los diversos componentes del medio biótico. Parece de justicia hacer mención especial de algunos de tales esfuerzos por cuanto establecen conexión directa con una obra que, como la presente, persigue aunar ambos aspectos sintéticos.

En primer lugar ha de destacarse un cuarteto de publicaciones del Gobierno Vasco que constituyen la contribución, sin duda, más importante al conocimiento de la flora y vegetación de la zona. Son éstas: la «Guía de los Arboles y Arbustos de Euskal Herria. Euskal Herriko Zuhaitz eta Zuhaizken Gidaliburua» (1990), el «Catálogo florístico de Alava, Vizcaya y Guipúzcoa» (1984), el «Mapa de vegetación de Alava, Vizcaya y Guipúzcoa. Escala 1: 25.000. Mapa de vegetación potencial escala 1: 100.000» (1986-91) y la «Vegetación de la Comunidad Autónoma del País Vasco» (1988). El equipo de expertos responsable de estas aportaciones trabaja en estos momentos en otro proyecto editorial no menos ambicioso, cual es el de la «Flora del País Vasco».

En segundo lugar hacemos mención de la trilogía publicada por la Editorial ETOR «Mendiak. Montes de Euskal Herria. Naturaleza y huella humana» (1980), «Itsasoa. El mar de los vascos» (1984) e «Ibaiak eta Haranak. Valles y ríos del País Vasco» (1989) que, entre otros temas, contiene una interesante información de síntesis al respecto que nos ocupa.

Aunque restringido a Navarra/Nafarroa, conviene citar una publicación que, en cierto modo, marcó un hito en la serie de precedentes que venimos comentando: «Navarra. Guía ecológica y paisajística» que la Caja de Ahorros de Navarra editó en1980. A ella habría que añadir la «Flora de Navarra» (1981-83), «Los bosques en Navarra» (1989) y el «Mapa de series de vegetación de Navarra a escala 1: 200.000, y memoria» (1994), todas ellas a cargo del Gobierno de Navarra.

Anotemos, por último, que buena parte de la información sobre el entorno natural biótico en Euskal Herria Continental tiene como referencia inexcusable la labor desarrollada por C. Dendaletche y otros expertos de universidades y centros de investigación de Baiona, Pau y Burdeos.